Hace aproximadamente una década nos propusimos hacer de Pearson una empresa de aprendizaje. Se dijo en aquel entonces, pienso ahora que con poca modestia, que debemos convertirnos en la compañía de aprendizaje líder en el mundo.
Hemos progresado en la conquista de nuestro objetivo. Y aunque nos enorgullecen nuestros logros, reconocemos la sabiduría en la observación de Alexander Pope.
No podemos detenernos, pues aún hay mucho por hacer. Millones de estudiantes no tienen la oportunidad de asistir a la escuela, otros se atrasan o abandonan por completo sus estudios; al mismo tiempo que millones de adultos sufren por la falta de posibilidades para realizar sus sueños.
Nuestra meta es llegar a todas estas personas y ayudarles a desarrollar todo su potencial..., a mejorar sus vidas a través del aprendizaje.
Queremos ayudarles a aprender dentro y fuera de la escuela, desde su educación básica hasta su desarrollo profesional. Hemos descubierto que el aprendizaje es tan valioso y fascinante como el conocimiento obtenido.
Por eso, donde quiera que veamos Pearson recordaremos que estamos en el proceso de aprender siempre.
